Evidentemente ha habido muchos aportes tecnológicos en la última década, que han ido permitiendo apurar muchísimo más los diagnósticos y los tratamientos, pero si algo ha revolucionado la práctica profesional de la medicina ha sido Internet. Internet nos ha permitido acceder tanto a los médicos como a los pacientes a fuentes de información masiva, nos ha facilitado el conocimiento desde cualquier punto del mundo. Pero probablemente estemos aún a las puertas de la verdadera revolución tecnológica…